Tensión en el escenario. Una vez culminada la actuación de Takeshi, llega el turno de Emi Igawa, y con ella, toda la fuerza de su piano. Detrás de la apariencia fría y calculadora de Emi se esconden sentimientos que solo es capaz de transmitir a través de su música. Además, Kôsei deberá llenarse de valor y enfrentar al fantasma de su madre.