El miedo se ha vuelto una influencia corrosiva en la vida moderna, que erosiona la capacidad de pensar con claridad, ¿a qué le tememos y qué podemos hacer al respecto? Una lista no exhaustiva de los temores con que lidia cualquier terapeuta cotidianamente incluye: el miedo a morir, el temor al fracaso, a la pobreza y a la soledad.