Davey Wexler nunca se había sentido tan solo. Su padre acaba de ser asesinado a tiros en el 7-Eleven cerca de su casa. Y ahora su madre los ha llevado a ella y a su hermano pequeño, Jason, a Los Alamos, Nuevo México, para quedarse con su familia y recuperarse. Pero Davey está retraído, lleno de ira, miedo y soledad. Entonces, un día, mientras explora un cañón, conoce a un niño mayor que se hace llamar Wolf. Wolf es el único que la entiende, el único que puede leer sus ojos tristes. Y él es quien la ayuda a darse cuenta de que debe encontrar la manera de seguir adelante con su vida. Davey es uno de los seres humanos más inquietantes y verdaderos de Judy Blume, y capta las formas profundas en que una persona puede cambiar que no se puede ver, solo sentir. Su historia ha sido apreciada, profundamente, por los lectores durante décadas.