«¿Quién no se ha hallado cometiendo un acto vil o insensato simplemente porque sabe que no debe hacerlo? ¿No sentimos, acaso, una inclinación a transgredir la ley por el solo hecho de que es ley? Este espíritu de perversidad, insisto, marcó mi ruina definitiva».
Un asesino es atormentado por la culpa, una pintura cuenta una historia maldita y en Poe extraordinario se esconde una obsesión por enterrar gente viva. La enfermedad se propaga en silencio, las paredes ocultan cadáveres y los gatos saben algo que nosotros no. Poe es gótico, macabro y elegante. He aquí diez de sus mejores relatos para comprobar que, si algo nos enseñó, es que el horror puede ser bello y que internarse en la oscuridad es otra forma de placer.
