Desde que mi padre se ha convertido en amo de casa todo va fatal. Hace comidas repugnantes, monta desastres con la lavadora y encima espera que yo mismo limpie mi habitación con mi propio trapo (¡qué ilusión!). Y lo peor de todo es que ha decidido que ahora yo soy su mejor amigo y no para de hablar conmigo. Hay que solucionar esto urgentemente, pero ¿cómo? ¡Vuelve Louis en la desternillante continuación de «Cómo entrenar a tus padres!»