Un día de abril de 1999, en la soledad de un hotel londinense, Michel Jackson descubre con admiración el trabajo del joven Arno Bani. Meses después, en julio, ambos protagonizarán en París una intensa sesión fotográfica destinada a crear la portada de su nuevo disco, "Invincible"por desgracia, el resultado nunca vio la luz. De ello se encarga el presente libro, que recoge, junto al perfil biográfico de los dos protagonistas, el espléndido fruto de aquellas jornadas mágicas, una serie de soberbios retratos que, glosados por un hermoso texto de Jéromine Savignon, ponen de relieve la extraordinaria personalidad de una figura irrepetible.