Dejar el nido requiere de algunas habilidades. No es fácil volar si nunca se ha hecho. Por eso estos aforismos, de una ironía sutil, poética y refinada, acompañados por unas ilustraciones humorísticas, reflexivas y "volátiles," son el manual perfecto para despegar. El pollito protagonista ilustra máximas como "Caer puede liberarnos de lo superfluo" al mismo tiempo que se desprende de las últimas cáscaras de huevo, o "Dejarnos llevar nos enseña el precioso arte de aterrizar" mientras patina sobre una pendiente, y otros sabios consejos sobre la vida.