En el Perú sufrimos una guerra interna entre 1980 y 2000, sobre todo en las regiones andinas y en la selva central, que es todavía bastante ignorada por la sociedad. En este libro, la antropóloga Mariella Villasante presenta una contribución a la mejor comprensión de este periodo, cuyas secuelas son evidentes: fragilidad de las instituciones del Estado, corrupción generalizada, y banalización de la violencia social.