En Ilíada se narra la ira de Aquiles; ofendido porque Agamenón, el jefe de los aqueos, le ha quitado una esclava, Aquiles se retira del combate, lo que inclina la balanza de la guerra a favor de los troyanos. Aquiles rehusa la embajada de los reyes aqueos que acudía a él rogándole que depusiera su ira