El interno de medicina del prestigioso Hospital Universitario Eiroku, Eijiro Saito, cobra un sueldo de apenas 38,000 yenes (unos 1317.50 soles). A 3 meses de haber egresado de la facultad de medicina de la misma universidad, recibe a su primer paciente en una guardia solitaria. El interno Eijiro experimentará el abismo que hay entre lo esperado y la realidad de la medicina en Japón. A pesar de las adversidades seguirá esforzándose día a día.