Rachel Brewster es una esquiadora de eslalon que, a los dieciocho años, acude a los campeonatos nacionales en Aspen, Colorado. Cuando regresa a New Hampshire, sin haber ganado ninguna medalla, está embarazada. El niño, Adam, el protagonista de esta novela, concebido en 1941 en el Hotel Jerome de Aspen, jamás sabrá la identidad de su padre. Rachel, por su parte, empieza a trabajar como monitora de esquí y, en los largos meses que pasa fuera de casa, deja al niño con sus peculiares abuelos. Adam crecerá en una familia que desafía todas las convenciones, incluidas las sexuales, y que evita preguntas relativas al pasado. Sin embargo, cuando a sus ochenta años regrese al Hotel Jerome en busca de respuestas, Adam se encontrará con algunos fantasmas inesperados. La inolvidable odisea que, en primera persona, nos ofrece Adam se convierte en un fresco de Estados Unidos, desde los años cuarenta hasta la segunda década del siglo XXI, desde la Guerra Fría y Vietnam, pasando por la era Reagan y la irrupción del sida, hasta llegar al Tea Party y Donald Trump.