Conan, el León de la Costa Negra, vive nuevas aventuras al lado de Bêlit: una tormenta los arroja a una idílica ciudad costera a merced de los dioses del mar, posteriormente se infiltran en Estigia, donde enfrentan a serpientes marinas y a Jinetes-Halcón y, finalmente, el bárbaro se separa de su compañera para cumplir una misión en un pueblo atemporal cuyos habitantes son descendientes de Alejandro Magno.