Los cazadores, primera novela de Salter es un brillante anticipo
de la ambición literaria del autor.
Comparado con Antoine de Saint-Exupéry por las escenas de combate en los
cielos, James Salter trasciende con creces el género bélico gracias a los símiles
entre las luminosas descripciones del paisaje y la tensión emocional de los
protagonistas; y convierte así esta travesía por el alma de Cleve Connell en una
extraordinaria variación del deseo de gloria enfrentado al espejo de la muerte.