Martin Lemelman rinde homenaje a su madre, a su familia y a todas las víctimas del holocausto nazi en contra de los judíos. En 1989 Martin Lemelman grabó en video a su madre Gusta. Como muchas otras señoras mayores se mudó a vivir a su casa y Martin quería conservar para siempre sus espeluznantes memorias de su infancia en la Polonia de los años 30 y su posterior huida de los nazis. Un homenaje a las víctimas del mayor genocidio de la historia moderna.